alistarse, listos...ya!!!!!: 02.09

22.2.09

DEPECHE MODE EN CHILE!

Algo del nuevo disco, llamado Sounds of the universe, que se lanzará el 20 de Abril!





http://www.emol.com/noticias/magazine/detalle/detallenoticias.asp?idnoticia=343393

http://www.depechemode.cl/

¿Observación?

Me mira mientras sostiene en su cuello ese pañuelo tan característico. Fuma su cigarrillo y comienza a escribir. Una llamada interrumpe la interacción.
En el otro lado alguien escucha música muy fuerte y la escritura no cesa. Quizás sean bocetos.
Un motor comienza a sonar. Que ganas que ese motor sonara entre mis piernas y el viento chocara a gran velocidad con mi cuerpo.
Otra conversación telefónica entra por mi oído izquierdo.
El ruido me cansa. Muchas micros, muchos autos.
Sigue ahí, ahora mirando el celular con cara de noentender y cada vez se llena los pulmones de nicotina con mayor frecuencia casi desesperadamente.
No sé que hacer. ¿Más evidente? Qué hacer en estos casos, se me apreta la guata. Esta realidad pues, cuál otra puede ser la que me tenga así. Tantas weas que hay que coordinar, cuál es el momento. Ya no quiero pensar más en esto, pero se me hace inevitable. Respirar, respirar, que pase, que se viva, todas las cosas en su momento.

Más temprano que tarde

Pasos...

Escucho pasos. Esas botas negras, gruesas y pesadas se acercan con largos y ligeros pasos. Están detrás de la puerta. Ya no hay escapatoria. Me tomo la pastilla que tengo firmemente en mi mano. Espero su efecto.

Las botas no han desaparecido, siguen detrás de la puerta, pero algunas comienzan a alejarse. Las pisadas de cada una no son al azar. El ritmo que forman es casi perfecto y ahora se suma un platillo y una trompeta.

Logran entrar a mi pieza. Parecen diablos ebrios que olvidaron a lo que venían. La tierra no deja que se vayan, ellos también cayeron en los vicios.

Muchos colores y bailes me rodean. Cae agua, me regalan cerveza, me mareo con estos diablos bailando a mi alrededor.

Los colores se mezclan en miles de manchas que se difunden y cubren toda mi pieza.

Veo mis pies y descubro que me han puestos cascabeles. Intento sacarlos, pero no tienen amarra que los sostenga, simplemente están en mi.

Las manchas siguen bailando y me uno a ellas, ya tengo mis cascabeles.

Me da sed, mucha sed. Se me apreta el estómago y toda la pared abdominal, me cuesta respirar, el pulso se acelera. Esto ya se está acabando y es hora de afrontar la realidad.